El debate entre el actual vicepresidente Mike Pence y la aspirante Kamala Harris, presentó un tono más armonioso que el primer debate presidencial, aun cuando en el lado republicano, se siguió tratando de abusar de las reglas del tiempo la mayoría de veces.
Según una encuesta publicada por CNN posterior al debate, en números generales Kamala Harris se impuso con una diferencia de 20% a Pence registrando 59%
para Harris 38% para Pence.
Como referencia en la elección anterior, en el debate vicepresidencial de 2016, Pence superó por 6% a Kaine, en 2012, Biden perdió por 2% frente a Ryan, en 2008 Biden aventajó por 15% a Pailin.
Mientras que Mike Pence trató de manejar una imagen más presidencial, vendiéndose como el experimentado que conoce los temas de gobierno debatidos, realmente no pudo contestar con mucha claridad por qué él y Trump harían un mejor trabajo que Biden y Harris, en el manejo futuro de la pandemia, más bien trató de defender la ya calificada como desastrosa, respuesta del gobierno a la pandemia, justificándose en el solo hecho de decidir cerrarle la puerta a los chinos al inicio de la pandemia, como “la” decisión que potencialmente habría salvado cientos de miles de vidas. Una apuesta muy dudosa, por cierto, dado que la realidad muestra que, a USA, a pesar de haber hecho esto, le ha costado más muertes que a la gran mayoría de las economías desarrolladas.
Un punto interesante fue el tema de la futura vacuna, donde Harris, enfáticamente señaló que se la aplicaría, solo si es recomendada por científicos como Fauci, pero definitivamente no si es por recomendación de Trump, haciendo eco a la incertidumbre que ha generado el hecho de que Trump tomara como bandera de campaña el tener una vacuna lo más pronto posible. Pence en parte respondió de forma adecuada, señalando que habían logrado en su administración, impulsar el desarrollo de la vacuna en un tiempo récord, menos de un año, pero se vio claramente hipócrita cuando trató de culpar a Harris de jugar a la Política con el tema de la vacuna, lo que dijo, podría costar la vida de miles.
Para Kamala Harris la situación era por lo mismo más sencilla, simplemente se centró en señalar la evidencia y a partir de ahí y de la incompetencia probada de sus adversarios, señalar que ellos por ser otros, son mejores, aunque tampoco presentó ninguna idea nueva sobre cómo manejar la pandemia, algo que efectivamente Pence señaló y acusó de plagiante constante a Biden.
Otro de los puntos que Kamala Harris logró levantar con éxito fue el fracaso de la guerra comercial con China, señalando que ha costado miles de puestos de trabajo y generado que muchos americanos (y ahí habló directo a la audiencia) hoy estén peor económicamente, (señalando temas como encuestas recientes que muestran ansiedad en una importante mayoría, de los que pagan renta, sobre poder cubrir el alquiler del mes entrante), algo a lo que Mike Pence difícilmente pudo contra argumentar, limitándose a tildar a Biden como un “Porrista de los Chinos que por décadas han abusado de USA” y volviendo a sacar el tema de que China era culpable de la pandemia.
Tal vez el punto más brillante de Pence, fue cambiar el enfoque del debate sobre el remplazo de la Juez Ginsburg por la Juez Barret, pues en lugar de centrarse en que es justo, atacó a los demócratas acusándoles de que si ganan las elecciones, ampliarían el número de jueces, hasta modificar el perfil de mayoría conservadora, usando la simple frase “retacarán la corte, una vez más el método de cambiar las reglas cuando no les favorece” dijo. Mike Pence, 3 veces cuestionó directamente a Kamala Harris sobre esto y 3 veces Harris evadió la respuesta señalando que es injusto que ellos nominen la Juez Barret antes de las elecciones, recordando la historia de el “honesto Ab Lincoln” quien en la misma posición, decidió que no era lo correcto y declinó nominar su propio candidato antes de las elecciones y finalmente declarando que los que han “retacado la corte” son ellos (los republicanos), pero de blancos, señalando que ningún candidato de los 50 pre-nominados que han presentado hasta ahora es negro. Sin embargo, no pudo negar directamente que intentarán tal maniobra en caso de resultar ganadores.
Una pregunta interesante que ningún candidato respondió con mucha claridad es si habrían establecido o considerarían establecer, un mecanismo para reemplazar al presidente en caso de que este se torne deshabilitado, algo que sería de pensarse, por la edad avanzada de ambos candidatos.
Según la encuesta de CNN 65% opina que Pence está bien calificado para ser presidente si se torna necesario vs un 63% que considera que Harris está calificada para tomar la presidencia si fuera necesario.
Sobre la claridad al expresarse, Harris obtuvo una ventaja de 18% sobre Pence, en la defensa de su candidato presidencial la ventaja de Harris se amplió a 30% sobre Pence; en estar en contacto con las necesidades de la gente, Harris superó por 23% a Pence; y en Unificación por encima del divisionismo Kamala Harris fue 28% mejor calificada que Mike Pence. Solo en tiempo de ataque, Pence superó por 20% a Harris en las opiniones de los encuestados.
Los debates presidenciales se tratan de ayudar a inclinar a los indecisos y moderados a que voten por su candidato. Midiendo esta situación, al parecer Kamala Harris habría obtenido mejores resultados que Mike Pence pues luego de este debate del 7 de Octubre 21% se dijo más inclinado por votar por Biden y solo 11% más inclinado por votar por Trump, otro 55% de los encuestados no cambió su opinión con este debate. Como referencia, en el debate pasado, 32% se sintieron más inclinados por votar por Biden y 11% más inclinados por votar por Trump mientras que 57% reportaron no sentir efecto en su opinión a causa del debate.
Como pifia final, una mosca que se posó sobre la cabellera canosa de Pence por 2 minutos fue catalogada, a manera de broma, como la ganadora del debate por distintos analistas.